una sorpresa para Aleksei

por **Alexa** Mar Mar 10, 2009 11:44 pm

Llegamos a la zona de las habitaciones-es aqui- dije señalando la puerta de su cuarto y dirigiendome a ella-espero que este aqui-deje las maletas de Anya a un lado y pique un par de veces esperando oir su voz

por **Alekséi D. Torbinskiy** Mar Mar 10, 2009 11:54 pm

Estaba tumbado en la cama, con la obra de Dostoievski, Crimen y Castigo, frente a mis ojos, empezándola a leer, cuando alguien llamó a la puerta. Suspiré una vez y aparté la vista de las letras para dirigirla a la puerta.

- ¿Sí? - pregunté con una voz dejada

por **Alexa** Mar Mar 10, 2009 11:56 pm

-demosle una sorpresa-susurre abriendo la puerta lo justo para entrar sin que el viera a mi acompañante- Aleks!!- dije emocionada riendo- tengo una sorpresa para ti, asique ponte decente-

por **Anya N. Petrov** Mar Mar 10, 2009 11:59 pm

No me dio tiempo a hablar, así que, tras que ella me dejara sola me dispuse a esperar tras la puerta impaciente a que esta se volvier a abrir, mientras escuchaba la conversación que se escabullía entre la puerta y el suelo

por **Alekséi D. Torbinskiy** Miér Mar 11, 2009 12:02 am

En el fondo no me extrañó que fuera Alexa, pero sí el modo en el que había entrado.

- ¿Qué sorpresa? - pregunté recostándome un poco y me miré la ropa que llevaba encima. Una camisa blanca, sin ninguna mancha, por obra y milagro de Dios, y unos vaqueros - ¿No estoy decente? - como mucho podría estar un poco depeinado, tampoco llegaba a ver mi no muy largo pelo

por **Alexa** Miér Mar 11, 2009 12:05 am

suspire sonoramente-bueno supongo que no importa, al menos levantate- volvi a sonreir acercancome a la puerta-listo?

por **Alekséi D. Torbinskiy** Miér Mar 11, 2009 12:08 am

Me levanté de la cama sin tener ni idea de lo que quiera que estubiera tramando Alexa, aunque suponía que no sería nada malo, confiaba en ella.

- Eh... creo que sí...

por **Anya N. Petrov** Miér Mar 11, 2009 12:10 am

Me estaba mirando en un espejo de bolsillo, cuidando de que todo estubiese bien y en su sitio, cuando oí la voz de Alexa decir muy cerca "¿Listo?" Me apresuré a guardar el espejito en el bolsillo del pantalón mientras esperaba a que se abriera la puerta.

por **Alexa** Miér Mar 11, 2009 12:11 am

asenti sonriendo y abri la puerta-pasa!!- le dije a la chica sin quitar la mirada de Aleks

por **Alekséi D. Torbinskiy** Miér Mar 11, 2009 12:17 am

Tras la puerta había una chica. Rubia, de mediana estatura, ojos azules... "No. no puede ser..." negaba con la cabeza con cara de asombro. Los ojos debían de estar a punto de saltar de mis cuencas y mi boca creo que faltaba poco para descansar sobre el suelo.

- ¿Anya? - logré articular sin salir de mi asombro - ¡Anya!

Sí, era ella. Corrí hacia allí, saltando una cama de camino, con la que casi no tropiezo, y pasé a Alexa, dejándola a un lado para llegar hasta Anya, a la que abracé en un fuerte abrazo con una gran sonrisa en la boca y la respiración agitada.

- Anya...

por **Anya N. Petrov** Miér Mar 11, 2009 12:21 am

Al principio pensé, por su expresión, que no le iva a gustar que estubiera aquí, pero de pronto le ví abrazándome, creo que ni siquiera me dí cuenta de que había corrido, simplemente le tenía junto a mí. Su efusividad hizo que soltara una sonora y cristalina carcajada.

- Ya, Aleks, ya está - dije con una sonrisa

por **Alekséi D. Torbinskiy** Miér Mar 11, 2009 12:23 am

Me retiré un poco de ella, sujetándola suavemente la cabeza por las mejillas, para verla mejor. Su pelo, su pálida piel, sus sonrojadas mejillas... y sus ojos. Sí, era ella, ¿quién otra podría ser si no?

- Anya, pero... ¿qué haces a...? ¿cóm...? - no podía si quiera pensar con claridad

por **Alexa** Miér Mar 11, 2009 12:24 am

no pude evitar sonreir, me esperaba una reaccion parecida, me encantaba ver a aleks feliz. Fui hacia la puerta dispuesta a irme-os dejo solos-les sonrei- tendreis mucho que hablar, luego os veo-

por **Alekséi D. Torbinskiy** Miér Mar 11, 2009 12:29 am

Miré a Alexa mientras se despedía, negando con la cabeza y mordiéndome un labio. Articulé un gracias con mis labios, de los que no escapó sonido alguno. Más tarde iría a darle las gracias.

- ¡Oh! ¡Anya! - la miré directamente a los ojos. Cómo la había echado de menos, y ahora me daba cuenta de ello. Miré a un lado, cosa que no me resultó facil, y ví sus maletas -. Vamos, vayamos adentro. - la indiqué mientras cogía varias de ellas

por **Anya N. Petrov** Miér Mar 11, 2009 6:28 pm

Soltándome de su abrazo cogí el resto de maletas y las dejé al otro lado de la puerta con un sordo golpe en el suelo. Luego esperé a que él hiciera lo mismo y me quedé quieta, de pies, mirándole a los ojos directamente con una sonrisa de sincera felicidad.

- Ay, Aleks... - casi suspiré - Te he echado mucho de menos...

por **Alekséi D. Torbinskiy** Miér Mar 11, 2009 6:47 pm

Al coger su pesado equipaje una amplia sonrisa acudió a mi cara. Eso me había hecho recordar al verano pasado, cuando habían hecho los tres juntos un viaje a Suecia, en el que Viktor no dejó de quejarse de las muchas maletas que llevaba Anya. La culpa era de su madre, que no dejaría irse a una "chica decente" sin su "ajuar" al completo, a lo que Viktor contestó que tal vez ese "ajuar" debiera acabar "al completo" en el mar.

Tras dejar las maletas en el suelo cerré la puerta de espaldas a ella, sin apartar mi mirada de los ojos de Anya. Tras oir sus palabras me acerqué a ella lentamente, sin prisas, y volví a coger su cara, esta vez por la barbilla, para acercar nuestros cuerpos.

- No tanto como yo... - susurré antes de juntar poco a poco nuestras caras y nuestros labios

por **Anya N. Petrov** Miér Mar 11, 2009 7:15 pm

Noté como llevaba mi cara hacia la suya y no opuse resistencia. Me encantaba la forma que tenía de hacer las cosas conmigo, fuera de la forma que fuera. Siempre era él, era su forma; era especial. Noté como sus labios rozaron primero los míos y aguantar más fue algo que mi cuerpo no pudo soportar. Rodeé su cuello con un brazo y con el otro su cintura, en un rápido impulso que acercó más aún nuestros cuerpos. Sus labios rozaban los míos con fuerza; los míos los suyos. Noté, como su lengua comenzó a adentrarse con cuidado en la oscuridad de mi boca, buscando la mía. La forma de la que lo hacía me hizo sonreír. Era fantástico. Cómo añoraba esos besos, sus caricias, su olor... de pronto, sin saber por qué, abrí mis ojos para mirar directamente a los suyos, separando apenas unos milímetros nuestros labios.

por **Alekséi D. Torbinskiy** Miér Mar 11, 2009 8:08 pm

Con la respiración agitada y una mirada de plenitud la observé, contemplando su pálida piel de muñeca de porcelana, su pelo rubio cayendo desde su cabeza hasta sus pequeños hombros, sus labios perfectos, su mirada azul mirando la mía. De mi interior, sin ser consciente de ello, surgió una fuerza que hizo que nuestras caras volvieran a juntarse, con más fuerza aún si pudiera ser, mientras con un brazo presionaba su cintura contra mi cuerpo y andaba poco a poco hacia adelante, acercándome poco a poco hacia la cama. No fue algo premeditado, simplemente surgió sin que yo tubiera necesidad de pensar en mis actos, el tacto de su piel contra mi piel, de su pelo enredado entre mis dedos, de su fragancia me dominaba. Simplemente era ella. Ella me dominaba.

por **Anya N. Petrov** Miér Mar 11, 2009 8:33 pm

Me dejé arrastrar por él hacia la cama, disfrutando de cada parte de él, de cada beso, de cada caricia... no podía pensar en nada más que no fuese en él, en lo que estaba sintiendo. Noté como el colchón se hundió ligeramente cuando Alekséi me dejó sobre él y cuando él se subió sin dejar de besarme. Noté como su boca comenzó a descender lentamente por mi cuello, con parsimonia, haciéndome suspirar y disfrutar con una repiración agitada cada beso, cada roce de sus labios contra mi piel, entregándome entera a él.

por **Alekséi D. Torbinskiy** Jue Mar 12, 2009 11:55 am

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La luz del sol me despertó a la mañana siguiente. A mi lado, abrazada a mi pecho, dormía Anya. Sin abrir los ojos disfruté de su presencia, concentrándome en la mano que reposaba sonbre mí, en su respiración lenta, tranquila y acompasada, en el aroma que desprendía y penetraba en mi olfato como un preciado perfume...

Con cuidado retiré su brazo y me levanté de la cama sin despertarla. Cogí aire profundamente mientras me estiraba, de espaldas a ella, y comencé a andar hacia el baño; necesitaba una ducha ya.

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