Un nuevo hogar

por **Alekséi D. Torbinskiy** Mar Feb 10, 2009 11:46 pm

Alekséi abrió la puerta de su nueva habitación. Con un leve suspiro observó rápidamente el cuarto. Era amplio, pero debía compartirlo con otras tres personas... "Ya veremos..." se dijo a sí mismo. Con pasos lentos y pesados se adentró en la sala con una pesada maleta en cada mano, cerrándo la puerta tras de sí con un puntapié. Se acercó a una cama, bajo la ventana y dejó su equipaje a sus pies para sentarse en el mullido colchón. Su padre se había quedado en el despacho del director hablando con él, aunque ya se habían despedido. El muchacho tenía algo de miedo aún, por no conocer nada, pero se convenció de que esto era lo que quería por lo que se había decidido a llevarlo lo mejor posible. Aleksei se giró para mirar por la ventana desde donde vislumbró los amplios jardines de la academia... por lo menos seguro que allí encontraría algún lugar donde estar solo si lo necesitara. El muchacho, cansado de no hacer nada, se decidió por dar una vuelta por los pasillos...

por **Alekséi D. Torbinskiy** Mar Feb 10, 2009 11:59 pm

Alekséi llegó a su habitación cansado, muy cansado. Se había perdido de camino entre los pasillos, aún desconocidos para él. Para cuando abrió la puerta de su cuarto ya había pasado al menos una hora. Rendido se tiró directamente en la cama sin ni siquiera desvestirse, rechazando cualquier idea de ducharse antes de acostarse. No tardó mucho en dormirse...

por **Alekséi D. Torbinskiy** Miér Feb 11, 2009 10:30 pm

Aleksei se despertó lentamente. Sus ojos aún no respondían bien, a pesar de la reinante oscuridad. Por lo que sabía o bien había dormido apenas unas horas o se había pasado un día durmiendo... supuso lo segundo. Lentamente se arrastró fuera de la cama y llevó pesadamente las maletas y sin ganas hacia los pies del armario; allí las abrió y empezó a sacar ropa, colocándola cuidadosamente en el lugar que le iva asignando y apartando una camisa blanca, unos vaqueros y la ropa interior que se pondría después. En el fondo nunca le había gustado tener un gran arsenal de ropa, al contrario que sus padres, por lo que no tardó en acabar de dejar las maletas vacías. Tras haber acabado con ellas las arrastró debajo de la cama y se desvistió dejando su ropa sucia en un cesto.

Veinte minutos después, ya duchado y vestido con ropa nueva, salió de la habitación a continuar con el paseo del día anterior...

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